En general, la miel tiene una cantidad limitada de compuestos nitrogenados, que son fundamentales para múltiples procesos a nivel celular. Para aumentar la cantidad de compuestos nitrogenados en la miel, se pueden utilizar diferentes técnicas, como por ejemplo:
1. Utilizar mieles más oscuras: las mieles más oscuras suelen contener una mayor cantidad de compuestos nitrogenados que las mieles claras.
2. Añadir nutrientes específicos para levaduras: se pueden añadir nutrientes específicos para levaduras, como sales de amonio y fosfato, para aumentar la cantidad de compuestos nitrogenados disponibles para las levaduras.
Es importante tener en cuenta que el exceso de compuestos nitrogenados también puede ser perjudicial para la fermentación del hidromiel, ya que puede producir sabores y aromas no deseados. Por lo tanto, es recomendable seguir un régimen nutricional adecuado y realizar pruebas previas para determinar el régimen nutricional óptimo para cada caso particular.
